Gira Tour Paraíso - Los dominicanos ovacionan a Alejandro Sanz en su fin de gira

Sacando su lado más rockero, Alejandro Sanz se reencontró la noche del domingo con los dominicanos para presentar con éxito el último concierto de su gira “Paraíso Express”, un inolvidable espectáculo cargado de alegría, emociones y mucho colorido. Durante dos horas el español encantó a un público mayoritariamente joven que vibró durante el concierto y no dejó de ovacionar al artista, que se entregó en cuerpo y alma a sus fans, interpretando la mayoría de los temas de su último disco, y algunos de sus grandes éxitos. La salida al escenario de Sanz, a las 9:15 p. m, provocó gritos, euforia y hasta piropos de parte de las chicas más cercanas. Él, vestido con unos pantalones jean de color azul , chaqueta negra y zapatillas Converse, arrancó la velada con “Mi Peter Punk”, una reflexiva canción de su reciente disco que habla de las personas que no aceptan las diferentes etapas de la vida, y continuó con “Lo que fui es lo que soy”, una joya fruto de sus primeros discos. Así continuaron “Desde cuando” y “Viviendo deprisa”, canciones que elevaron aún más los gritos del publico, ya de por sí entregado de antemano en todas y cada una de las canciones del repertorio. Para esta ocasión Sanz contó con un impresionante y espectacular montaje audiovisual, que hacía que la escenografía se adaptara a cada una de las canciones que interpretó. El ambiente se fue calentando y el tema “Nuestro amor será leyenda” dio paso a “Corazón partío” otra de las canciones más disfrutadas por sus fans. Los dominicanos lo recibieron con el calor que los caracteriza y él agradeció dándolo todo. El cantante, de 41 años, se mostró enérgico, provocador y dinámico. No sólo cantó, también tocó varios instrumentos, mostrando su versatilidad. El sonido estaba perfecto, además de la ejecución de los músicos y las coristas. La banda estuvo dirigida por el neoyorquino Mike Ciro, compuesta por 13 músicos, entre los que se destaca el dominicano Chris Hierro en teclados y coros. La producción del concierto fue de Saymon Díaz. La exitosa banda local de pop/rock Bocatabú fue la telonera, fue su primera vez en ese escenario, y sus integrantes dijeron estar felices por la oportunidad de estar ahí para abrirle al “maestro” Sanz, como definió Gio, su vocalista, al cantante español. “Cápsula de amor”, “Sinfonías del silencio”, “Historias vírgenes”, “Bang bang bang”, “A contraluz”, y “No te detengas”, respectivamente, fue su acertado repertorio. Junto a una de sus vocalistas, Sara Devine , interpretó “Looking for paradise”, un tema original de Alicia Keys, el público se encargó de corear el famoso estribillo “ohh… ohh… ohh”. Antes de despedirse de sus seguidores ofreció un “medley” que incluía algunas de las canciones más representativas de su carrera: “A la primera persona”, “Mi soledad y yo”, “Amiga mía” y “¿Si fuera ella?”. A las 11:05 se despidió con un “Hasta siempre” y un improvisado “taconeo” junto a sus músicos.