TAL DIA COMO HOY

En julio de 1993, Alejandro viene en la portada de la revista Smash Hits pues está ultimando los detalles para empezar la gira de verano y la revista es invitada por el cantante a acudir a ver uno de los últimos ensayos a "La nave", su local de ensayo. Cuando llegan ven a Alejandro sentado y con el micro en la mano. Con una voz súper penetrante está cantando el tema "El escaparate". Ensayan el final del tema una y otra vez. Son más de la nueve y media de la noche pero antes de terminar Alejandro se levanta y se dirige a la batería. Junto a su banda hace un par de temas. Tocan con ganas, la música les sale de dentro, los solos de guitarra son increíbles y a Alejandro no se le ve todos los días con las baquetas en la mano. Es su forma de relajarse después de haber estado ensayando un montón de horas. Al acabar, Alejandro invita a la revista a bajar a un pub y frente a la mesa de billar (juego en el que Alejandro es todo un experto) ofrece una entrevista a la revista y hablan sobre su directo y sobre su gira que empezará "a finales de julio nada más volver de América. Voy allí a hacer promoción, a preparar un poco el terreno. La verdad es que todo va bien, sobre todo en México y Centroamérica. Pero hay países en los que todavía no he entrado, como Argentina. Yo erre que erre y adelante. El trabajo de un artista extranjero en un país así es muy del artista cuando va, pero es fundamental un seguimiento de la compañía para que cuando te hayas ido la gente no se olvide. Afortunadamente en México mi compañía es divina, ellos siguen haciendo el trabajo y en contacto con nosotros, así que muy bien".  En cuanto a su banda dice: "He cambiado al guitarrista, Javier Catalá, para pena de algunas. Estaba planteándose otros caminos, quería grabar, de hecho ha grabado con un amigo suyo y se llaman Miranda. Yo pensé que este año harían algo, presentaciones o promoción, pero no ha sido así. Él antes de trabajar conmigo estaba con Miguel Bosé, el año pasado Miguel no hizo gira y se vino conmigo, pero este año sí va a hacerla y se va con él. Conmigo entonces vendrá Nando González, que es mallorquín. También es cantautor, toca fenomenal, canta muy bien y tiene su grupo aparte de esto. El resto de la banda es igual, Cherokee, Fran y Miguel", dice Alejandro, que también habla de los ensayos: "Yo he estado quince días porque no tengo más tiempo, pero ellos llevan ya un mes o mes y pico. Los temas del año anterior ya no hay que tocarlos tanto, un poco más por Nando, y con las nuevas canciones están encantados. Les gusta tocar y los temas salen solos, son muy buenos músicos. Nos hemos puesto a tocar hoy un tema totalmente nuevo que ni siquiera habían escuchado y nada más pillar los acordes estaba sonando. Estoy muy contento". En cuanto a las sorpresas que tiene preparadas para su directo dice: "Un disco nuevo que no es poco. Este año voy a hacer menos galas, serán 40 o 50 en España y unas 30 en México, tampoco tengo más tiempo. Los conciertos de esta gira van a ser más largos porque el año pasado nos las veíamos negras para poder hacer una hora y media, teníamos 10 canciones! Date cuenta, teníamos que hacer auténticas virguerías, tocar un tema de Paco de Lucía, un tema mío inédito, alargar los temas... Este año tenemos 20 canciones para poder llenar hora y media o dos de concierto. Hay sorpresas, todos los temas nuevos, son diez canciones nuevas que va a escuchar la gente. Este año voy a hacer coros, cosa de voces, un rollo así bonito. No sé, cosas diferentes, más madurez, una escenografía más bonita" dice Alejandro al que también afecta la crisis que sufre el país: "La crisis está y si yo la noto que tengo ya 40 o 50 galas firmadas, no sé que será de la gente que está ahí... Hay una crisis fuerte pero creo que es también el miedo de la gente. Es la pescadilla que se muerde la cola. A la gente le dicen que hay crisis, entonces tiene miedo de ir a comprar y el señor de la tienda no vende. Aparte de por operaciones económicas mal hechas, las crisis vienen dadas y se acrecientan por el miedo de la gente. Todos la notamos. Los empresarios están mucho más cautelosos y han esperado un poco a ver la salida de mi disco. Lo que pasa es que el año pasado hice 120 actuaciones, hubo muchas muy exitosas y confían en mí. El verano pasado ningún empresario perdió dinero conmigo, también miro mucho por ellos porque es el pan nuestro de cada día. Ellos están ahí para ganar dinero y hacer su trabajo. Si yo les saco todo lo que puedo, mañana no van a tener nada que dar. Se trata de ser un poco flexible y darte cuenta de lo que está ocurriendo", aclara. También habla de la nueva casa que se ha comprado: "Es como un chalecito adosado. No es una casa espectacular ni nada de eso. Es una casita con un trocito de jardín para mi perra y sí, es bastante grande. La casa está bien, lo que más me gusta es que tiene una azotea arriba enorme. Pienso poner un toldo árabe con faroles para estar ahí arriba de noche, con la barbacoa y tal. Luego la mitad de mi habitación la he puesto con cristal de invernadero, todo lleno de plantas. Tengo una bañera grande hidromasaje. Pero lo principal por lo que la he comprado es porque abajo tiene un sótano muy grande donde voy a poner mi estudio, un local de ensayo. Quiero que tenga incluso un pequeño escenario porque he pensado que así podré hacer un show-case para gente de los medios y amigos", dice. Finalmente cuando le preguntan si sigue siendo el mismo responde: "La gente se lleva una decepción enorme cuando ven que no has cambiado porque les gustaría que fueras borde, insoportable, engreído. Yo mira, aquí estoy en mi barrio, sigo con mis cosas, trabajando mucho y ya está. Hago mi vida y soy feliz pero hay gente a la que le gustaría tener razón. Como en todo hay mucha gente que ensucia la imagen de los demás, con la gente de los medios ocurre lo mismo, siempre hay cuatro insoportables que van de malos. Entonces ¿qué pasa? ¿por eso vas a decir que como eres periodista eres lo peor? pues no. Hay gente que les ha llegado la fama y se lo han creído de una manera imposible, pero no se puede decir: tienes fama, seguro que has cambiado. Muchas veces es la gente la que cambia, la que no te perdona que pases por su lado y a lo mejor un día no la veas. Tienes que estar muy pendiente porque si pasas por mi lado y eres famoso ¿cómo te atreves a no verme? Cosas así se comentan y se comentarán toda la vida. El que quiera saber si he cambiado mucho que vengan a verme, que hable, que me diga por qué... No sé, yo soy el mismo para bien y para mal", concluye.