Sanz figura en la constelación de estrellas que hoy participaron en la "Gala Latina Inaugural de 2009", junto a Marc Anthony, Paulina Rubio, George López, Angélica Vale, Tony Plana, Cucu Diamantes y Yerba Buena, entre otros.
La gala es tan solo una de varios actos públicos y privados que este fin de semana han dado el pistoletazo para la investidura de Obama el próximo martes.
"Yo aposté por Obama desde las primarias, aposté por él desde el principio y esto es una forma de celebrar todo ese camino largo que ha recorrido y que de alguna forma, hemos recorrido todos", dijo un Sanz sonriente.
"Considero que esa victoria es un poco de todos y me siento orgulloso y feliz de poder estar aquí", agregó el intérprete de temas como "Corazón Partío", "Y si fuera ella", o "Mi soledad y yo".
Momentos después de un ensayo para la gala ante más de 3.000 personas en Union Station, en el centro de Washington, Sanz habló de futuros proyectos pero, sobre todo, del significado que para él tiene el triunfo de Obama.
El cantante español auguró mejores tiempos para las relaciones entre Estados Unidos y España.
"Especialmente en lo que se refiere a la relación con España, va a ser un cambio radical. Había una relación muy discreta, cordial pero no estrecha", señaló.
Recordó que, antes de los comicios y durante una reciente reunión de mandatarios en El Salvador, tuvo la oportunidad de conversar con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre las posibilidades de una victoria del candidato demócrata.
Zapatero dijo entonces que "ojalá" ganase Obama, enfatizó el artista.
"Yo creo que esto representa muy bien lo que es el sentir de toda España en ese respecto", continuó.
Sanz compartía este domingo escenario con artistas de la talla de la mexicana Lila Downs, quien en sus múltiples discos se declara en defensa del inmigrante y de las etnias que componen el mosaico estadounidense y se manifiesta en contra de la pobreza.
En ese sentido, Sanz cree que los artistas como él tendrán "cada vez más" una función social y la responsabilidad de impulsar causas sociales.
"Nosotros que muchas veces nos quejamos de que si la fama es incomoda...ahora tenemos la oportunidad de utilizar esa fama para algo que realmente pueda ayudar a otras personas", observó.
"El compromiso con las causas sociales -agregó- debe ser cada día más, va a ser algo muy normal. Ya no es solo una cosa de celebrar".
Por otra parte, al repasar los logros de su última gira de promoción del disco "El tren de los momentos", Sanz aseguró que "todos los conciertos son memorables".
Por ahora, dedica todo su esfuerzo a la producción de su próximo disco con la ayuda del compositor boricua Tommy Torres, una obra aún en ciernes que "aún no tiene título".
"Me gusta cómo trabaja (Torres). Creo que para septiembre puede que esté listo ese disco", dijo Sanz.
El cantante español regresa al tema de Obama, destacando que su mensaje, después de todo, se inspiró en el "Sí se puede", que fue la consigna de lucha de los inmigrantes durante la década de los sesenta.
"Creo que es un momento histórico para todos los hispanos, para la comunidad latina en Estados Unidos. Ojalá (Obama) pueda realizar todo lo que habló de los núcleos familiares", dijo al referirse al polémico debate sobre una reforma migratoria integral que beneficie a la población indocumentada en este país.
La gala es tan solo una de varios actos públicos y privados que este fin de semana han dado el pistoletazo para la investidura de Obama el próximo martes.
"Yo aposté por Obama desde las primarias, aposté por él desde el principio y esto es una forma de celebrar todo ese camino largo que ha recorrido y que de alguna forma, hemos recorrido todos", dijo un Sanz sonriente.
"Considero que esa victoria es un poco de todos y me siento orgulloso y feliz de poder estar aquí", agregó el intérprete de temas como "Corazón Partío", "Y si fuera ella", o "Mi soledad y yo".
Momentos después de un ensayo para la gala ante más de 3.000 personas en Union Station, en el centro de Washington, Sanz habló de futuros proyectos pero, sobre todo, del significado que para él tiene el triunfo de Obama.
El cantante español auguró mejores tiempos para las relaciones entre Estados Unidos y España.
"Especialmente en lo que se refiere a la relación con España, va a ser un cambio radical. Había una relación muy discreta, cordial pero no estrecha", señaló.
Recordó que, antes de los comicios y durante una reciente reunión de mandatarios en El Salvador, tuvo la oportunidad de conversar con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre las posibilidades de una victoria del candidato demócrata.
Zapatero dijo entonces que "ojalá" ganase Obama, enfatizó el artista.
"Yo creo que esto representa muy bien lo que es el sentir de toda España en ese respecto", continuó.
Sanz compartía este domingo escenario con artistas de la talla de la mexicana Lila Downs, quien en sus múltiples discos se declara en defensa del inmigrante y de las etnias que componen el mosaico estadounidense y se manifiesta en contra de la pobreza.
En ese sentido, Sanz cree que los artistas como él tendrán "cada vez más" una función social y la responsabilidad de impulsar causas sociales.
"Nosotros que muchas veces nos quejamos de que si la fama es incomoda...ahora tenemos la oportunidad de utilizar esa fama para algo que realmente pueda ayudar a otras personas", observó.
"El compromiso con las causas sociales -agregó- debe ser cada día más, va a ser algo muy normal. Ya no es solo una cosa de celebrar".
Por otra parte, al repasar los logros de su última gira de promoción del disco "El tren de los momentos", Sanz aseguró que "todos los conciertos son memorables".
Por ahora, dedica todo su esfuerzo a la producción de su próximo disco con la ayuda del compositor boricua Tommy Torres, una obra aún en ciernes que "aún no tiene título".
"Me gusta cómo trabaja (Torres). Creo que para septiembre puede que esté listo ese disco", dijo Sanz.
El cantante español regresa al tema de Obama, destacando que su mensaje, después de todo, se inspiró en el "Sí se puede", que fue la consigna de lucha de los inmigrantes durante la década de los sesenta.
"Creo que es un momento histórico para todos los hispanos, para la comunidad latina en Estados Unidos. Ojalá (Obama) pueda realizar todo lo que habló de los núcleos familiares", dijo al referirse al polémico debate sobre una reforma migratoria integral que beneficie a la población indocumentada en este país.
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