TAL DIA COMO HOY

En mayo de 1992, Super Pop se cuela en el primer concierto de la gira "Viviendo deprisa" que tiene lugar en la localidad de Puertollano, en Ciudad Real. El ambiente es increíble y aunque el concierto no es hasta las doce, a las diez el local ya está invadido por las más de dos mil fans que han acudido a verlo. Alejandro antes de salir al escenario escucha música: "Es para mentalizarme y meterme en la situación. No estoy nervioso, pero tengo ese gusanillo típico de los momentos antes de salir al escenario. Casi igual que lo que sienten los toreros antes de salir a la plaza" - confiesa Alejandro. Es la hora. De repente se apagan todas las luces y se comienzan a adivinar sombras sobre el escenario. Los músicos toman posesión cuando suena "Es este amor" y aparece la silueta de Alejandro al fondo. Un haz de luz lo ilumina y comienzan los desmayos. Con su inseparable guitarra, camisa de lunares, chaleco y vaqueros, Alejandro empieza a tocar sus temas: "Lo que fui es lo que soy", "Los dos cogidos de la mano", "Viviendo deprisa", "Toca para mí" o la deseada "Pisando fuerte". Luego toca flamenco y vuelve a sus temas: "Duelo al amanecer" y "Todo sigue igual". Cuando le toca el turno a "Completamente loca" dice: "Esta canción es muy especial para mí porque estoy completamente loco por vosotros". Llega la hora de la despedida. Alejandro anuncia el último tema, "Se le apagó la luz" diciendo:"me mantuvo en vela toda la noche hasta que la terminé". Tras despedirse, se marcha del escenario, pero la histeria de las fans hace que vuelva a salir. Suena la música de "9 semanas y media" mientras Alejandro presenta sus músicos y decide repetir "Pisando fuerte" y "Se le apagó la luz". Esta vez sí que es el final. Parece que ni los llantos ni los gritos de las chicas consiguen traer de nuevo al cantante, pero finalmente, ante la sorpresa de todos, Alejandro reaparece para tocar el tema "Mi corazón se queda aquí". Ha sido una noche de emociones fuertes. Pero este solo es el primer concierto. Le quedan 90 citas más, para dejar en cada sitio, concierto a concierto, todo su corazón.