TAL DIA COMO HOY

En junio de 1995, Alejandro confiesa que encontrar el amor verdadero no es tan fácil como parece. Y es que la fama tiene sus ventajas pero a la hora de encontrar el amor puede jugarle malas pasadas: "Lo que pasa es que te distraes mucho más. Hay muchas mujeres bellas en el mundo, no solo físicamente sino que hay veces que tienen eso que haces que tu visión del mundo se limite a ella" pero Alejandro se da cuenta de que para sentir verdadero amor tiene que dar marcha atrás y retroceder hasta su adolescencia: "Empiezo a recordar el barrio en el que me crié, la intensidad con la que vivía. Si me enamoraba era un amor de la cabeza hasta la suela de los zapatos. Y miraba las estrellas y me comía el cielo a bocados y era capaz de sentarme como los gatos a la luz de la luna... pero luego ese romanticismo se diluye. No se pierde pero está mezclado con otras cosas..." - concluye Alejandro.