TAL DIA COMO HOY

En agosto de 1991, Alejandro es un chico de 22 años que se está labrando su carrera a golpe de promoción y entrega. La palabra que mejor lo define es su naturalidad, tiene claros sus objetivos y sabe lo que cuesta conseguirlos. Aunque todavía le queda un largo camino por recorrer para llegar a ser un ídolo, le está empezando a llover un reconocimiento que está aprendiendo a encajar, pues la fama le parece algo atractivo, aunque él solo es un chico de Madrid al que le gusta salir de tapeo, la ropa tejana y que las fans ya le dejen mensajes en el contestador. "En todos los sitios a los que he ido la acogida ha sido increíble, los locutores de radio ni se lo creen" -dice. Atrás deja sus proyectos de estudiar empresariales y de crear para otros artistas: "Aunque me hayan pedido canciones gente muy importante este año lo dedicaré entero a este disco que tengo en el mercado" -dice. Pero su proyecto más inmediato es escaparse de vacaciones a San Lúcar: "a una casita que he alquilado con piscina para estar tranquilo. Me encanta el ambiente de los pueblos de playa. Sobre todo cuando empieza a atardecer, aquellas horas en que las chicas ya se han puesto guapas, morenitas... con esos tops blancos y se respira un no se qué en el ambiente... es algo mágico."