TAL DIA COMO HOY

En abril de 1992, Alejandro viene en la revista "Estar Viva". A sus 23 años afirma que tiene una edad difícil de llevar, tal vez por eso le pide a las mujeres "amor de verdad y mucha comprensión". Y es que Alejandro anda buscando a su media naranja aunque para encontrarla no lo tiene tan complicado como otros porque recibe más de 2000 llamadas telefónicas de sus admiradoras. Las chicas cuando lo ven gritan, lloran, se desmayan... La histeria es colectiva y le rompen la ropa tratando de quedarse con un pedazo de su héroe: "Cuando pasa esto siento muchas cosas a la vez. Pienso que todo lo que he cantado y he contado tiene una repercusión, que hay gente que siente las cosas que yo he expresado. Cuando veo un montón de chicas histéricas pienso que no es porque yo sea muy alto ni muy atractivo, pues yo no soy Miguel Bosé, sino porque han conectado conmigo. Pero a veces siento miedo, porque la histeria se contagia y es peligrosa" dice este ídolo de jovencitas que ha conseguido unas cifras de ventas asombrosas con tan sólo un disco que se titula, muy oportunamente, "Viviendo deprisa". Su madre que echa las cartas le predijo que tendría mucho éxito. Hoy, a pesar de la fama y el dinero que le han reportado sus canciones en los últimos meses, sigue viviendo son sus padres "que son los encargados de recordarme que tenga cuidado, que la fama se va igual que viene". Alejandro reconoce que en todas sus canciones relata sus propias experiencias vitales: "Me suelo inspirar en las relaciones sentimentales que he tenido. Casi siempre he salido con chicas mayores que yo porque me gustan las mujeres maduras con mucha personalidad y el tema "Pisando fuerte" habla precisamente de eso" dice. Aunque se le ha relacionado con una presentadora venezolana de la televisión hispana de Miami, Alejandro asegura que no tiene novia pues no quiere unirse a nadie mientras tenga que dormir cada noche en un hotel. No le interesa la política y le preocupan la ecología y los temas cotidianos, a los que canta en su música. Pero sobre todo habla y canta al amor. Será por eso por lo que le comparan con Eros Ramazzotti, y por lo que se ha convertido en un sex-symbol, porque sus palabras van directamente al corazón: "En realidad todos nos sentimos románticos aunque hay mucha gente que no lo admite", concluye.